Desde que la vicepresidenta Kamala Harris tomó el relevo al presidente, Joe Biden, para liderar la candidatura demócrata a las elecciones presidenciales de Estados Unidos el mes pasado, las campañas electorales han tenido que reinventarse y enfrentar un escenario totalmente diferente al que se anticipaba. En ese nuevo contexto, los 36,2 millones de latinos que tienen derecho al voto vuelven a ser el foco del partido azul.