“Me encantaría meterle el último clavo al cajón del kirchnerismo con Cristina [Kirchner] adentro”. A dos años del intento de magnicidio que sufrió la entonces vicepresidenta, la expresión de deseos fue formulada por Javier Milei y provocó una amplia serie de repudios. Incluso Kirchner le respondió al mandatario: “¿Así que ahora también me querés matar?”, preguntó. “Sería bueno que, en lugar de insultar a diestra y siniestra, y amenazarme con mi muerte, encontraras la forma de que los argentinos puedan volver a comer cuatro veces al día y en su casa, sus hijos crecer sanos para poder estudiar y progresar y los viejos tengan sus remedios para poder vivir”.