El presidente electo estadounidense, Donald Trump, tardó poco más de 24 horas en consumar su amenaza de demandar al principal diario de la capital de Iowa, el Des Moines Register, por publicar tres días antes de la cita con las urnas del pasado mes de noviembre una encuesta que resultó completamente equivocada, pues vaticinaba que el candidato republicano perdería en ese Estado del Medio Oeste. Ese sondeo dio alas a la campaña de su rival, la vicepresidenta demócrata Kamala Harris, y cayó como una bomba en la de Trump.