Cristina Kirchner pierde una nueva batalla judicial. La Cámara de Casación penal argentina, un tribunal de apelaciones de segunda instancia, ratificó este miércoles una condena a seis años de prisión e inhabilitación perpetua por corrupción contra la expresidenta. Kirchner apelará el fallo ante la Corte Suprema, la última instancia donde puede pedir su absolución. La Corte no tiene plazos y su decisión puede demorar años. Mientras tanto, Kirchner seguirá en libertad y haciendo política. El 17 de noviembre próximo asumirá la presidencia del Partido Justicialista, la forma legal del peronismo, con la intención de “ordenar” a la principal fuerza opositora al Gobierno de Javier Milei y presentar batalla en las elecciones legislativas de 2025.